+ 300 km en Fija!


Era miércoles todavía y el grupo que se animó a ir a Manzanillo había quedado de verse en el Porcelain a las 21.00 hrs. Yo llegué como a las 22.30 y era “temprano” ya que no habían llegado muchos aún. Fue pasando el tiempo, y conforme pasaba el tiempo, nuestras pocas horas de sueño posibles se iban llendo también. Cerca de las 23.30 salimos del Porcelain rumbo a casa de Noé para agarrar su mochila y que se uniera al grupo para irnos a dormir a casa de Johan y de allí iniciar a pedalear a las 5.30 del jueves. Para esto Herr Mann Monster (Benjamin) nunca llegó y hablo más tarde para disculparse que fue por cuestiones de “pepinos”.

En casa de Johan nos quedamos Nacho, Donas, Noé y yo a dormir. Nos dormimos cerca de las 2.30 y nos teníamos que despertar como a las 4.30 para poder dar el primer pedalazo a las 5.30 y aguantar hasta llegar a nuestros destinos, que en ese día eran Cd. Guzmán y Colima. Total, sólo pestañeamos 2 horas y desde tempra a pedalearle.

Benjamin llegó temprano, y nos alistamos. Como somos mexas, nos tardamos un rato mas en salir y terminamos saliendo como a las 6.15. Sergio nos alcanzó en López Mateos y Av.Patria, y así ya estábamos completos prácticamente, puesto que Chava nos iba a alcanzar más adelante en su coche. Agarramos nuestro paso y no tardamos mucho en salir de la ciudad, que a esa hora no había tráfico, sólo se veían algunos coches con un montón de maletas por todos lados de los que madrugaron para irse a vacacionar.

Todavía no había luz solar, el clima estaba totalmente favorable y los tramos para salir de la ciudad para agarrar carretera no estaban muy traficados todavía, cosa que nos hizo un parote para llegar más rápido a Guzmán.

Por allí de la mitad del primer tramo de tolvaneras de 9 km. que un alambre de llanta de tráiler me hace la daga y entra por la pared de la llanta y se poncha. ¡Yeah! inaugurando las ponchadas temprano. A pesar de la daga, sirvió para que Chava y Fermín (primo de Chava) nos alcanzaran allí y Nacho y Benjamin subieran al coche las maletas que el tarado del alemán no se digno a llevar un día antes al Porcelain. Nos refrescamos de volada, unos panes con nutella y a seguirle.


Yo pensé que nos ibamos a fastidiar mucho más de ese tramo, pero al final no estuvo tan mal. Sólo la segunda parte que eran casi 30 km. si estaba algo enfadoso; afortunadamente no nos toco viento en contra ni tolvaneras ni nada, y el sol apenas iba saliendo, así que tampoco estaba muy caliente todavía.

Cruzamos el desierto arenoso y llano y comenzamos a trepar para llegar a Cd. Guzmán. Después de algunas subidas sentí el cansancio y la falta de sueño. La verdad de las cosas es que si me sentí mal en un momento, e iba pedaleando por inercia. Afortunadamente no tuve que frenar ni hacer algún tipo de movimiento que implicara un esfuerzo mayor, que si no, seguro me pasaba algo hahaha. Total, llegamos a donde era la caseta en Guzmán y allí nos quedamos un rato a descansar. Todos comimos algo, tomamos agua y Sergio y yo nos echamos una siesta mientras los demás seguían cotorreando.

Llegamos a Guzmán como a las 12. 30 y duramos como 2 horas allí. Teniamos opción de quedarnos en Guzmán con Gerardo, pero decidimos mejor pegarle hasta Colima, todavía era temprano y andábamos animosos. Después de la siesta ya me sentía muy bien, y todos ya habían descansado y comido y todo, entonces mejor seguimos, así ya sólo quedaría para el día siguiente el tramo de Colima a Manzanillo que eran muchas bajadas.


El trayecto de Guzmán a Colima no es muy largo, sin embargo está más o menos trincado. Muchas subidas, de las cuales la mayoría son largas y no tan inclinadas, que después de varios miles de pedalazos no sabes que es mejor, si muy inclinada y corta o larga y no tan inclinada. En fin, no teníamos opción más que seguir pedaleando para poder llegar a Colima.

Por allí de las 18.40 hrs. llegamos a Colima. Fuimos directo a comer, y a hacer unas compras en “Ley” un supermercado barato que aquí no hay (al menos yo no sé dónde). Después de haber comprado cosas y haber comido algo, nos fuimos a casa de Noé (rifadora la casita). Nos echamos un baño, unas chelas y nos fuimos a dormir. No era muy temprano, y según nosotros queríamos salir a las 5.30 para aprovechar lo más obscuro y que no nos fastidiara el calor y el sol.

En resumen del día 1: 190 km. aprox. 12 horas en total. Unas 8 horas pedaleando y muchos miles de pedaleadas. Ponchados: Benjamin y yo.

El viernes si nos dejamos ver chaflanes y salimos ya para agarrar la carretera como a las 8.30 hahahahha. El sol ya estaba calentando, y rápido. Nos tocó un tramo nublado, pero comparado con lo que venía ese día la verdad delas cosas es que no fue nada.

De Colima a Manzanillo era lo divertido. En realidad la distancia eran unos 100 km y lo pesado ya había pasado. Era mucho bajar y mucho llano. El chiste era no agarrar tanto sol y calor. Pues bien dice el dicho: “al que madruga dios lo ayuda”. Nosotros no madrugamos y dios no nos ayudo; de hecho todo lo contrario hahahaha.

Peor no pudo salir la verdad. Igual estuvo divertido, sin embargo pudo haber estado mil veces mejor. Hubo exceso de ponchadas (Benjamin 6, Donas 6, Noé 2, si no es que más). Salimos tardísimo ya con sol. El calor nos hizo pedazos rápido. Los trayectos que lográbamos avanzar sin fallas eran muy rápidos, íbamos como a 40 km/h aprox. y en las bajadas si subía bastante, como a 63-67 km/h.


En fin, a pesar de las dagas de las ponchadas, estuvo muy divertido la verdad, ese trayecto es para quitar los pies de los pedales y dejarse llevar en las bajadas, cosa que en la ciudad esta difícil hacer.

La daga mayor: Nuestro brother Noé se cayó faltando unos 30 km para llegar y atrás de el se vino Chavita. El resultado: Fractura de clavícula para Noé y algunos raspones-quemadas y a Chava le fue bien, solo unos raspones-quemadas. En fin, sabíamos que podía pasar algo así, que dentro de lo malo, lo bueno fue que no venía coche ni nada por el estilo que se hubiera puesto bastante majadero el asunto. Una familia hizo el paro y se llevaron a Noé. De allí en fuera todo al 100.


Llegamos a la ciudad-pueblo de Manzanillo como a las 16.00. Un tramo que teníamos pensado hacer en 3-4 horas, lo hicimos en 8 hahahah. Muchas ponchadas, muchos tiempos muertos, mucho sol, mucho calor, pero por el otro lado, muchas bajadas, mucha diversión y mucho pedaleo. Llegando fuimos al hospital a buscar a Noé y a esperar a que pasaran por el. De allí nos fuimos a x3m boardshop, ahí nos dieron unas chelas, cotorreamos un rato y fuimos al soriana a comprar cosas para monchar.

El día y la viajada se había terminado para nosotros. Sólo quedaba tomarnos unas chelas y descansar como merecíamos.

En resumen del día 2: 100 km. aprox. 8 horas en total. Unas 4 horas pedaleando. Otros muchos miles de pedaleadas. Ponchados: Benjamin, Donas y Noé (múltiples ocasiones). Accidentados: Noé y Chava. Contentos: Todos, hasta Noé.


En conclusión. Creo que somos el primer grupo que hace un viaje de ese tipo (en México) en bicicleta de piñón fijo (menos Sergio porque le da miedo). Pedaleamos unas 12 o 13 horas en total. Recorrimos poco más de 300 km, y contra el pronóstico, llegamos en 2 días, cuando la mayoría decía o creía que lo haríamos en 3 días. Muchas caras alegres, muchas risas, yo diría que exceso de risa (fuimos puro vato piratisima) muchas chelas, mucho sol, mucho asfalto, tierra, piedras, viento, no sé, mucho de todo.

Lo mejor del caso es que lo hacemos por diversión. La principal motivación era viajar en bici, agarramos un destino con playa lo suficientemente lejos como para tardar un rato y que fuera un reto. Todo sea por un buen resultado.


Ahora ya sólo queda organizarnos y hacerlo otra vez, ¿Qué destino les late?

Más fotos en la galería de Inlé (Johan) aquí y en la galería de Sergio aquí. El video coming soon.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

tssssss que perron.

Magui Arana dijo...

Son mis idol¡¡¡¡ bieeen felicidades¡¡
Padre crónica